Suicidio
El viento leve
Le despeinó la
cara
La sal marina
Endureció sus
sienes.
Cerró los ojos y
vio figuras
Con el murmullo del
mar
Rodeándolo todo.
No deseaba creer
En el Destino
No deseaba soñar
Las mismas voces
Cerró los ojos y
vio figuras
Con el silbido de
la brisa
Envolviéndolo todo.
El mar, ese
espacio insondable
La playa, la nube
de tormenta
La caracola
sibilante…
Cerró los ojos y
vio su propia figura
Adentrándose en el
mar
Hundiéndose en una
ancha avenida
De sal y arena